En Spark! Discovery , se empodera a los alumnos para que satisfagan sus necesidades sensoriales y participen en actividades que facilitan una mayor concentración y aprendizaje a través de salas sensoriales. Se enseña a los alumnos a regular su propio comportamiento antes de participar en otras actividades académicas.

Según Jess Harbison, profesora Spark! Discovery , los alumnos tienen acceso a la sala sensorial como parte de su horario diario y practican vocabulario básico para comunicarse cuando están listos para las actividades sensoriales. «Para algunos alumnos, estas actividades incluyen trabajo intenso con un gran esfuerzo físico. Por ejemplo, trepar, saltar a la colchoneta y recorrer la pista de obstáculos», explica Harbison. Otros alumnos prefieren actividades más tranquilas, como resolver rompecabezas, columpiarse o jugar en el tubo de burbujas o con juguetes sensoriales. «Concluimos nuestra sesión escuchando una canción relajante mientras los alumnos ruedan sobre un rodillo o una pelota. Cuando los alumnos salen de la sala sensorial, sus cuerpos están tranquilos y listos para aprender».

La sala sensorial de Spark! ayuda a los alumnos a tener éxito de diversas maneras. Los alumnos descubren qué tipos de actividades les relajan, lo que les ayuda a frenar los comportamientos agresivos y disruptivos. Son capaces de reconocer cuándo necesitan autorregularse y solicitar un descanso y una actividad específica en la sala sensorial. Esto conduce a un entorno de aprendizaje más controlado para los alumnos y los profesores, lo que contribuye a mejorar la excelencia académica en Spark!

Queremos dar las gracias a nuestros patrocinadores: Spark! Discovery Organización de padres y profesores Spark! Discovery , The Weld County Trust y el Departamento de Educación Especial de SVVSD.